Datos Generales
Centro Masajes : Paradise Love
Ubicación : Metro Salvador
Costo : $25K + adicionales
Horarios : 11:00 primera hora del turno PM
Fono : 9 6639 1668
Recepción : Llegué adelantado, ella ya había llegado, me convidaron agua mineral.
Higiene : MPL, no hace falta decirlo, todo impecable
Terapeuta o Masajista
Masajista : Valentina
Contextura : ¡RICA!
Trato : 7 Se maneja, tiene cancha
Cara : 7 Bella, una sonrisa que es una provocación al pecado
Besos : 7 uff…
Masaje : N.A.
Sensitivo : 6,5 no le puse 7 pa que no digan que estoy empotao… jajaja
EL 4/01 quise agendar con Valentina (CMR) y Claudia me dijo que no había problemas para la próxima semana. Desde ese día, preguntaba seguido y la nena no aparecía, estaba enferma. Hoy 6/02, más de un mes después, por fin logré encontrarme con ella.
Al llegar, me recibió Cony, me llevó al box del primer piso (delante mío había entrado otro cliente), me ofreció un agua mineral y me contó que Valentina ya había llegado y vendría enseguida.
Al par de minutos, y entra ella, sonriente. Nos miramos, nos abrazamos y empezamos a besar, con tutti al tiro. Le pregunté por su salud y comentamos su ausencia y volvimos a los besos. Estuvimos unos minutos conversando y besándonos apasionadamente. Ducha y nos encontramos de nuevo, ella ya estaba en lencería. Mientras mi boca se encontraba con la suya, mis manos recorrían todo lo que se podía. Raudamente, le quité el brassiere y disfruté d e sus hermosas tetas. Nuestros cuerpos estaba adheridos uno con otro, yo desnudo, ella en colaless. Hice el ademán de quitarle el colaless y ella intentó hacerlo con sus manos, la detuve, esa tarea me correspondía. Le dejé los churrines a media hasta y volví a la faena besucona, mis manos recorrían la piel de su magnífico culo.
Por ahí, conversamos la alternativa adicionales y acordamos sus estipendios. Ya que nos habíamos detenido, aproveché de bajarme de la camilla, la hice apoyarse en ella y procedí a terminar de quitarle el colaless. Desde esa posición, era fácil tentarse, besé sus nalgas, separé sus piernas y mi lengua se aproximó a sus delicias. Ella se acomodó y yo intensifiqué mi intromisión lingüística, pasado un rato, la hice girarse, ella se tendió de espaldas en la camilla y yo retomé mi sabrosa tarea.
Después de un buen en ese juego, ella me detuvo y me dijo “ya, me toca a mí”. Ahora era yo el que estaba de espaldas sobre la camilla y ella inició su parte del examen oral. Llevaba algunos minutos en eso cuando la invité a subirse a la camilla de manera de prodigarnos placer mutuamente.
Lo siguiente fue justificar el pago de adicionales… ¡Qué cosa más deliciosa! Conozco a Esta preciosura desde 2013 y era primera vez que tenía ocasión de invadir su intimidad. Hicimos algunos cambios de posición… cuál de todas más ricas.
Para la etapa final, ella me invitó a un paseo por la orilla del río Volga y por ahí anduvimos hasta que mi cuerpo se estremeció de placer.
Ducha, vestirse, pagar, promesas de volver a vernos y a la inhóspita calle.
De más estaría decir que vuelvo a recomendar a Valentina, una de las mujeres más bellas que he conocido en el circuito y con excelente servicio, además.
Ahora es demasiado tarde, princesa
Búscate otro perro que te ladre, princesa.