Datos Generales
Nombre: Ana independiente
Ubicación : Santiago Centro, metro moneda.
Costo : 25 más tips (adicional)
Horarios : tarde tipo 20:30 aproximadamente
Fono: 954990168
Recepción : excelente
Higiene: limpio todo en orden.
Terapeuta o Masajista: Ana
Contextura : 6,7 chiquita, linda, cintura pequeña y caderas acorde, senos grandes y naturales.
Trato: 7 como si nos conociéramos de toda la vida.
Cara: 6,5 mirada calentona.
Besos : 7 de todo tipo, al menos conmigo…
Masaje: 6 bueno puede mejorar.
Sensitivo: 7 cc.
Después de mi encuentro con Amanda, tuve que realizar diversas gestiones en el centro, comprar algunas cosas, buscar otras, y comencé a sentir algunas molestias después de ese encuentro cuerpo a cuerpo, tan intenso con Amanda. Eran más de las 8 pm y los números de los distintos centros ya no respondían, mientras que sentía la necesidad de un masaje con urgencia y ya que estaba en el centro, seguí intentando… mi último llamado es a Ana, quien me responde amablemente, le comento que requiero un masaje, ella recuerda que ya habíamos conversado antes, punto a favor y me indica las coordenadas.
Estaba a un par de calles así que llegue rápido, subo y al llegar a la puerta abre una señorita de lindo rostro, mirada dulce, tierna, de voz suave, pelo rubio y crespo, de piel muy blanca, con una linda sonrisa. Ana me saluda cariñosamente. Acto seguido me pregunta si yo estaba de cumpleaños, al responder de manera afirmativa me abraza y en ese instante puedo sentir sus grandes pechos contra mí, después me da un beso suave, delicado, que era imposible no responder.
Ella vestía unas calzas y una camisa tipo mezclilla que realzaba su gran busto y pequeña cintura, me lleva a una habitación que cuenta con camilla y un sillón, me ofrece ducha, paso a asearme ya que me había duchado hacía poco, después de guatita a la camilla no sin antes pedirle un abrazo el cual me da con un nuevo beso, esta vez más largo, beso que comenzó suave y comenzó a cobrar intensidad. Pasado unos minutos me dice “ya de guatita” y comienza el masaje, el cual fue bastante bueno, me relajo bastante, en eso conversábamos de la vida, de ella, de mí, muy relajada ella.
En un momento ella se quita casi todas las prendas de ropa, excepto su bikini, puedo apreciar la blancura de su piel y sentir lo suave que es, en la medida que ella continuaba el masaje. Sigue masajeando mi cabeza y cuello estando frente a mí en la camilla, mis manos ya se iban a sus nalgas, lo cual se lo mencionó, ella se ríe y me dice que toque si quiero, es tentadora la oferta, sin embargo, opte por recibir bien el masaje. Ana continua su masaje, se sube y me quita un nudo de la espalda, me acaricia y siento sus pechos en mi espalda, posterior a eso siguen caricias y nos unimos en un beso, después me dice date vuelta y fue maravilloso sentir sus labios junto a los míos y como ella con todo su cuerpo, se disponía a proporcionarme cariño, me siento y ella estando de pie, nos besamos y puedo acariciar sus espalda hasta bajar a sus nalgas, las cuales son firmes, ricas al tacto, seguimos así, ella va por un preservativo, en eso yo me pongo de pie y ella se pone de rodillas procede a colocar el preservativo y a realizar un oral suave e intenso solo con sus labios y boca. Introduce todo en su boca, que linda escena, y con gran esmero consigue una gran erección, y continúa conmigo dentro de su boca. Le pido que se detenga y me agacho quedando ambos de rodillas y comenzamos a besarnos con mayor pasión, mientras mis manos acariciaban su espalda, después besaba su cuello y ella mi pecho y después yo sus grandes y ricos pechos, mientras comenzaba a puntear su bikini, las caricias siguen hasta que bajo su bikini para posteriormente y lentamente comenzar a unirnos, sintiendo el calor de su cuerpo, así como su estrechez, que rica y sublime sensación, estuvimos así unos minutos, besándonos y moviéndonos suavemente, en eso ella me dice feliz cumpleaños y me vuelve a besar, siento un ambiente ya de total complicidad.
Después le pido que se sienta en la camilla, ya estaba total y absolutamente desnuda, quise besar su entrepierna, sin embargo me indicó que no, sigo hacia arriba, sus pechos de aureola grande, pezones ya duros, hasta llegar a su boca, antes de unir nuevamente nuestros cuerpos ella me pide una pausa para usar un poco de lubricante,- “para disfrutar"
-me dice- ok dale, le respondo. Se pone de pie, lo busca, al ir puedo notar su cintura pequeña cuando vuelve, la abrazo por ella y nos miramos como si nos conociéramos de toda la vida. después lo aplica frente a mi, ya me dice, dando inicio a lo que seguiría.
Suavemente comenzamos a besarnos, estando ella nuevamente sentada en la camilla, nos besábamos con mayor intensidad nuestros cuerpos se unen lentamente, sintiendo como me iba abriendo camino en ella y a su vez, pude observar como su rostro denotaba el placer que experimentaba, fui de menos a más aumentando el ritmo según nuestra respiración, estuvimos así hasta que ambos no dimos más, acabando juntos, sintiendo los estertores de su cuerpo, todo esto en una mezcla de abrazo paraguaya más la ayuda de la camilla. Después nos quedamos abrazados, nos miramos con complicidad y besamos suavemente, entre ternura y calentura.
Ana me limpia, me da las gracias por este momento, nos besamos nuevamente y me ofrece ir ducharme, ella se va desnuda al baño, prepara la ducha y vuelve, me toma de la mano, me pasa una toalla y me conduce hasta el baño donde nuevamente nos besamos, ella es muy rica besando.
Respecto al baño, puedo señalar que es amplio, agua con buena presión me ducho y posteriormente me seco. Al salir, ella me muestra el departamento y las otras habitaciones habilitadas donde una destaca sobre las otras por ser más espaciosa, nos miramos y me dice esta es especial para portarnos mal y me vuelve a dar un beso rico, mientras yo acariciaba su rico trasero. Nos vamos a la habitación, me visto le cancelo el adicional y nos fusionamos en un beso apretado, intenso, donde ella me hace hacia ella y yo a ella hacía mí, tomándola por su pequeña cintura y rico trasero…
Antes de salir unos últimos besos y tenía la sensación que ella no quería que me fuera y yo a su vez no quería irme… fue un encuentro donde las cosas se dieron y fluyeron como si hubiésemos sido íntimos desde siempre.
Fue un día donde recibí cariño y regalos no contemplados en la atención normal o adicional previamente por parte de Amanda y después por Ana. Si bien esto ocurrió hace unos días, recién puedo redactar esto para ustedes.
Volvería: Ana es poseedora de una belleza pocas veces vista, que dan ganas de raptarla, por supuesto que volvería.
Se hace difícil elegir pues, últimamente he logrado una buena sintonía con las chicas visitadas, que además de jugadas, resultan ser atentas y realizadoras de buenos masajes.
Ana es tal cual las fotos de su publicación acá una de muestra.
Saludos,
Solito.