Hace algunas semanas, reporté un dual Zafiro / Cata. A Zafiro ya la conocía (en el sentido bíblico) y debo decir que me encanta. Cata fue una gratísima sorpresa, jugada a tope, besucona, etc. Me estaba debiendo, entonces, una sesión a solas con Cata. El viernes, de visita por Paraíso, me la topé y quedamos para “el lunes” (hoy), le informé a Valeria (CMR) para que me dejara agendao y he aquí el relato de lo acontecido:
Datos Generales
Centro Masajes : Paraíso
Ubicación : Metro Plaza de Armas
Costo : $20K + adicional
Horarios : 12:00
Fono : 9 6549 2914
Recepción : Como reciben en Paraíso, excelente
Higiene : Impeque, como lo he dicho todas las veces
Terapeuta o Masajista
Masajista : Cata
Contextura : delgada, todo bien puesto, tetitas pequeñas, rico culo
Trato : 6,5 muy bien
Cara : 6,0 esos ojazos me transportan
Besos : 6,5 besucona, ricos, profundos, húmedos, haaaartos
Masaje : 6,5 Fue al final de la sesión, estábamos pochitos
Sensitivo : 6,5 muh güeno
Llegué unos minutos antes de la hora, consulté por wsp con Valeria (CMR) si podía ya subir. Al llegar me recibe Cata en ropa de calle, un bonito vestido que realzaba sus encantos. Antes de pasar al box, nos estuvimos besuqueando, le iba a subir el vestido para acariciarla y me percaté que las cortinas estaban abiertas, los vecinos iban a tener show gratis, así que nos fuimos al box y ahí sí que nos desatamos: besos y caricias a granel.
Me trajo la toalla y le propuse ducharnos juntos, ahí ella lavó esmeradamente mis partes sensibles y yo hice lo mismo con las suyas.
De regreso al box, ella me esperaba apoyada en la camilla, me las arreglé para que quedara de espaldas y, luego de una adecuada fase de precalentamiento, ataqué con mi lengua donde ella más iba a disfrutar. Así fue, luego de un buen rato, ella se estremeció, sus piernas apretaban mi cabeza y una mano me apretaba contra su humanidad.
Volvimos a un pololeo más suavezón, hasta que ella tomó un profiláctico y lo aplicó. Empezó un rico oral, con regaloneo al entorno. Me tendí de espaldas en la camilla y ella se trepó para darnos placer mutuo.
Ella se bajó y volvió a subir, pero esta vez quedó montada, de manera que nuestros sexos se encontraron frente a frente. Estuvimos unos minutos dedicados a los besos y caricias de nuevo, hasta que, de repente, FC encontró cálido refugio. Ella se empezó a mover, alternando con besos.
Se bajó de la camilla y yo la seguí, se volvió a apoyar en la camilla, de frente a mí, la besé intensamente, la hice que girara, luego que doblara el tronco y se apoyara en la camilla y FC volvió a encontrar su refugio. Mi pelvis chocaba con sus glúteos, cada vez con mayor frecuencia. Después, la hice quedar de espaldas y volví a atacar. Ella complementaba mi tarea con su mano. Hasta que creo que volvió a llegar a las alturas del placer… eso dijo, por lo menos.
Lo siguiente fue un trabajo manual de Cata, para llevarme a mí ahora a contemplar el Nirvana con un final muy especial.
Ducha (juntos, claro), vestirse, pagar y pa la calle.
Volveria? Antes de retirarme, Zafiro anduvo por ahí, marcando territorio jajaja ¿Qué puedo hacer yo?
Y conste que no me postulé a moderador porque me falta el requisito de ser caliente. jajaja
Ahora es demasiado tarde, princesa
Búscate otro perro que te ladre, princesa.