Centro Masajes : Bliss55
Ubicación : Metro Plaza de Armas
Costo : premio de la rifa + los extras para completar el full
Horario : 12:00 am
Fono : el publicado
Recepción : Muy Buena, me toco esperar un rato mientras se desocupaba el box, pero muy guapa la recepcionista
Higiene : Muy buena, baño limpio, sin malos olores
Terapeuta o Masajista
Masajista : Pamela
Contextura : Rica, muy ricas curvas
Trato : 7
Cara : 6.7
Besos : 7 de polola caliente que te extrañó en la cuarentena
Masaje : 7 muy bueno, relajante y muy agradable
Sensitivo : 7
Como primera cosa, vengo a ofrecer mis disculpas por atrasarme en el reporte del cobro de esta rifa
Pude recién pasar por Bliss en el límite para cobrar el premio, de hecho fue el último día.
Y encima tuve mucha carga laboral que me impidió hacer reporte ayer mismo.
Super ansioso dirigí mis pasos al centro y contactó a Bliss para coordinar
La comunicación fue muy fluida y sólo tuve que tener presente el código que se me entregó por interno de los admin del foro y mi usuario
Tras la presentación de las chicas, me la jugué por repetir mi debut en los masajes, con la espectacular Pamela
La mejor decisión que he tomado en mucho tiempo, por que me lo pase increíble
Me ofrecieron la posibilidad del dual, pero sentí que esta experiencia debía vivirla a full con una sola chica. Ya vendrán los tiempos de compartir el box con varias chicas, como lo han hecho varios de ustedes.
ni hablar del cuerpazo de Pamela, que si la veo en la calle, sin duda me quedo babeando y me doy vuelta para seguir viéndola.
Pasó por la respectiva duchita para sacarme el calorazo que hizo ayer.
Comienza el masaje y con una grata conversación muy relajada y simpática con Pamela que me hizo entrar en más confianza y disfrutar de un excelente masaje.
Cuando llega el bendito "dese vuelta" yo estaba con torticolis de tanto querer comerme con los ojos en el espejo el cuerpo de Pamela.
El sensitivo, exquisito, recorriendo toda mi humanidad. Un rico 69, para terminar bajando de la camilla y me dedico a devolver el sensitivo con un oral intenso, lubricando al máximo para preparar el camino a lo que iba.
Todo lo anterior matizado con harto beso, de polola en cuarentena, hasta que por fin nos animamos a saciar las ganas del full, primero en la banquita que complementa el box y después sobre la camilla, donde tuve que hacer mis mejores esfuerzos para postergar lo inevitable.
en síntesis, una grandísima experiencia, que me dejó con las piernas adoloridas, pero con una sonrisa de oreja o oreja.
Volver, claro que lo haré, cuando la carga laboral me lo permita.
No puedo menos que agradecer la fortuna de haber ganado la rifa.
Pretendo participar en las próximas, sea para ganar de nuevo o bien para que otro camarada de camillas tenga la oportunidad de disfrutar lo mismo que lo hice ayer.
Gracias totales