Centro de masajes: Jadín Erótico
Ubicación: Santa Lucía
Recepción: como de la casa
Higiene: todo impecable
Terapeuta o Masajista
Masajista: Pamela
Contextura: exquisita, curvilinea, de todisimo mi gusto
Trato: muy bueno, muy simpática ella
Cara: guapa la morena venezolana
Besos: muchos y muy buenos, protocolo pandemia (advertido previamente)
Masaje: muy bueno
Sensitivo: excelente
De curioso participé en la rifa comprando dos números, me dije quizás sea buena experiencia. Resultados.....ganador! y yo wow! como lo hago ahora, estoy en una comuna con fase 2. Por fortuna notificaron que se pasó a fase 3. Emocionado me dije "Excelente, puedo ir hasta un fin de semana", pero tenía tantos temas que atender en el trabajo que se me iba a ir la oportunidad de cobrarlo, así que me las ingenié para ver que inventaba en el trabajo. Por fortuna saqué una buena excusa para poder salir por la mañana debido que en la tarde es complicado por el tráfico vehicular. Me preparé en la mañana, iba todo ansioso, pido el uber y me agarro con un taco en av Matta. La administradora me escribe que están pidiendo la hora con la chiquilla y yo disculpandome le pedí que me entendiera, le envié mi ubicación y no hubo problema. Llegué 15 minutos atrasado pero me recibieron super bien. Luego llamaron a la chiquilla Pamela (previamente coordinado con la administración). Me toma la temperatura y me da alcohol gel por protocolo covid.
Posterior al recibimiento, entro al box y en unos minutos me recibe Pamela, super cordial, perfumada y con esa carisma caribeña que se destaca siempre. Procedí a tomarme la ducha (aunque ya había tomado una en casa). Al finalizar, me dirijo nuevamente al box y a los miutos ella entra, en un baby doll negro con transparencia donde se podía apreciar todas sus bondades. Ella me dice con su tono de voz caacteristico "amor por favor póngase cómodo", ya con eso, me puse cómodo, me acosté en la camilla y ella procedió a aplicar el masaje de relajación. Tuvimos una conversación bastante grata, diversos temas a medida pasaba el tiempo donde a su vez el ambiente se tornaba mas cálido y provocativo.
De pronto ella se sube a la camilla y empieza a masajear mi espalda y cadera. De pronto comienza a pasar por la zona inferior y empiezan las sensaciones donde solo me entregué a sus manos, caicias y sobretodo su lengua que te comienza de a poco a invitarte a hacer lo prohibido. Me pide voltearme y comienza a besar mi cuello, pecho, bajando poco a poco hasta el amigo que a cada segundo apretaba y bombeaba sangre como motobomba. Usando su lengua y expeiencia se me erizó la piel al sentir su pasión allí abajo mirándome fijo a los ojos. Me hipnotizó esa mirada que solo me decía "papi dame más".
Ya después de un rato jugueteando, me invita a un sofa cama que estaba ya preparado y alli sigue jugando allí abajo. Al pasar los minutos le digo al oído que deseo sentirla dentro , al escucharme, ella se levanta a buscar un preservativo, lo coloca y se posa sobre mi. Ya una vez arriba comenzó a mostrar de lo que esta hecha la mujer caribeña. Con sus gemidos cada vez mas fuertes provocándome aplicar nalgadas, manoteo mas agresivo y besos mas apasionados. Llegó un lapso donde le digo "trátame como si fuera tu hombre", en eso me mira y fué como si el mismo demonio la tomara hasta hacerme sentir éxtasis.
Antes de acabar le dije si me dejaba acabar en su pecho, donde ella me quitó el preservativo, me miró, siguió jugando allí y comenzo a aplicar estimulación manual mirándome nuevamente a los ojos y disfrutando como caía la explosión de leche en su pecho y parte de su boca.
Ya acabado, nos miramos, nos reimos , descansé un momento y procedí a la ducha nuevamente. Al volve ella me esperaba con agua y preguntando si todo estaba bien. Ya una vez vestido, ella me acompaña a la salida, se despida muy cariñosa con un abrazo y un beso.
Camino a casa me decía "que costó hacerme el tiempo pero valió la pena, ahora a seguir trabajando".