Centro Masajes : something sweet
Ubicación : Metro P de valdivia
Costo : 35 + tips
Horario : 16:00 am
Fono : el publicado
Recepción : Buena
Higiene : Buena
Terapeuta o Masajista
Masajista : Anais
Contextura : delgada, harmoniosa
Trato : 7
Cara : 7
Besos : 7
Masaje : 6.5 (Pero no voy por eso)
Sensitivo : 7++
El día martes pude contactarme con sweet something y con la suerte que me contestó y reconoció Anais, con cual queria reservar justamente.
Hablamos un poco por el wsp y dejé reservado para ir a las 4 de la tarde.
A la hora acordada, llegué al lugar, aviso que estoy afuera y me abre la puerta otra chica recepcionista.
El lugar es una casa grande, la cual en su primer piso es la oficina de la chicas. El lugar muy espacioso.
Paso a un box a esperar a Anais, la cual llega después de un rato y nos cambiamos de box a uno con mas onda.
Como siempre toalla, chalas y ducha de rigor y vuelta al box donde me esperaba Anais.
Comienza el masaje en camilla como siempre suave, y conversamos de la vida, los proyectos y la pandemia.
Nos conocemos hace tiempo y siempre ha habido buena onda. Solo se me habia perdido despues que se fué del Templo y mas encima le robaron su celular, así que no habia como encontrarla hasta que vi su figura en una de las fotos del local.
Ya con el masaje completado, pasamos al dese vuelta, y ahí ella comenzó a ponerse mas cariñosa
harta crema en sus manos y comienza a masturbarme mientras yo acostado acaricio su cola y sus piernas. Se quita completamente la ropa interior y se sube a la camilla, ahí nos abrazamos y acariciamos mutuamente.
Retrocede un poco para tomar mi pene y acariciarlo, comienza el oral s/c el cual es un lujo, con harta saliva y hasta el fondo.
Me pide cambiarnos a un futón que estaba al costado y ahí ya nos desenfrenamos...harta caricia, orales mutuos y penetración....
Como deseaba estar nuevamente con Anais!!...rica, delgada. complaciente y muy simpática.
Ella disfruta mucho las caricias y el oral sobretodo, se moja bien y es exquisito entrar en ella. Traté de mantenerme y aguantar todo lo posible, pero finalmente tuve que acabar.
Seguimos acostados uno al lado del otro conversando un rato y luego a la dura realidad pandémica.
Feliz eso si por tener nuevamente a Anais en contacto y siempre con la mejor disposición.
Volveré, obviamente...la proxima semana ...aprovechando que la tengo mas cerca.