Datos Generales
Centro Masajes : KissMe
Ubicación : Huerfanos
Costo : 40k
Horarios : 15:0
Fono : al número del aviso
Recepción : maravillosa
Higiene : impecable
Terapeuta o Masajista
Masajista : Anaí
Contextura : Delgada
Trato : 7 -educadísima y simpatiquísima
Cara : 7 -Linda ella.
Besos : 6.5 -sólo porque el besuqueo partió a la mitad, pero eran riiiicos.
Masaje : 7 -no duró mucho el masaje propiamente tal, pero lo que fue, fue excelente
Sensitivo : 7...uffff
Procedo al relato: El sábado salí a caminar por el santo centro de la ciudad, partiendo del sector Mapocho (me gusta esa turbiedad de ese sector) y no sé si había una convención de chicas escort, pero estaba lleno (Sn Pablo/Bandera) y para todos los gustos. Casi me engancho con una chiquita, pero decidí bajar la calentura en un centro legal como lo es KM, que dicho sea de paso no visitaba hace mucho. Busco el teléfono en este mismo foro (bendito), y procedo al whatsapeo. Se demoran en responder, asumo que es porque están ocupadas. Para hacerla corta, me demoré como 30 minutos en conseguir la hora y la dirección. Total es Sábado y no hay nada más que hacer. Llego (la entrada está en una galería, así que hay un guardia que mira con cara de culo sin pedir nada) y me abre la puerta una morena (café con leche, diría capuccino por lo rica), delgadita, rica con un traje de encaje transparente rojo que dejaba toda su linda humanidad a la vista. Unas pechugitas del tamaño justo para completar la armonía de ese cuerpo. Saludo, me hace pasar a la sala, y casi disculpándose que habia sólo 2 chicas y la otra estaba ocupada...me dice que si me parece atenderme con ella....O sea, no se me ocurriría atenderme con nadie más, venga pacá nomás! Ropa fuera, ducha, camilla.
Y partimos con unos masajitos suaves que recorren todo el cuerpo de una, pasando piolamente por las partes sensibles que me erizan los pelos y otra cosa. Se va paseando por atrás, por los lados y por delante haciendo que mis manos le toquen las piernas y casualmente se agacha para que ellas queden a la altura del Paraíso...y se mueve con las manos ahí...noooo loco....pero qué masaje, y yo de guata aún. Sale de ahi, se sube a la camilla y me pasa el Paraíso por la cabeza (de arriba), se estira sobre mi espalda, y con su boca me recorre la espalda, siguiendo hasta donde se separan las piernas y empieza, a estas alturas, la tercera pierna. Se baja y vuelve a los masajes, ahora a las piernas (las 3), pasando por tdos lados....que maravilla de masaje. Casi como que no me quiero dar vuelta, pero me lo pide y lo hago sin chistar. Al mirarme, veo que ya tengo el capuchón puesto....weón, en qué momento lo puso??? que mina....que pro! y dale con la boca, con las manos, con todo. Es ahí que me pregunta qué tipo de masajes quiero.."ya vamos con todo" y dale. Se baja de la camilla. Vuelve a subirse por mi cabeza y posa su paraíso sobre mi cara que rápidamente se acomoda en la boca y le damos a un sesenta y nueve de los mil demonios. No quedó rincón sin explorar. Se mueve y se acomoda en el clásico misionero y la pobre camilla empieza a crujir como que se va a desarmar. Nos bajamos y pasamos al sofá que está al lado y seguimos por un lado, por el otro y empiezan ahi unos besuqueos maravillosos. Nada más rico que unos buenos besos mientras aplicas el dale-que-dale hasta que llegó el momento de acabar con esto y se vino una explosión de colores. Sólo quedan besos finales, cariños postguerra, ella riendose de mi cara de felicidad y me voy a la ducha.
Volverias : o sea....volvería y volveré.