Centro Masaje: Candy Candy
Ubicación: Metro Plaza de Armas
Costo: el publicado
Horario: 11 am
Fono: el publicado
Recepción: Muy buena
Higiene: Buena
Masajista: Eva
Contextura: Curvilínea.
Trato: 6.7
Cara: 6.5
Besos: no hubieron
Masaje: 5
Sensitivo: 6
Desde que apareció Eva por estos lados que me llamó la atención, sobre todo con algunos reportes bastante buenos, así que finalmente decido agendar con ella. Agendo sin mayor problema. A la hora acordada estoy en el centro. Me recibe una chica que no pude reconocer, aunque me pareció conocida. Muy buena recepción: me recibe con una sonrisa, me toma la temperatura y me da alcohol gel. Me lleva al box París (curiosamente, el único que conozco), el cual mantienen impecable. Me ofrece té, café, agua y me dice que Eva ya está llegando. Le acepto el té, el que va a preparar mientras me desvisto. Finalmente vuelve con el té, el cual comienzo a beber mientras sigo esperando a Eva. Me lleva a la ducha y a la vuelta, al fin, llega Eva. Me saluda amablemente, nos presentamos y me tiendo en la camilla. Estaba a punto de comenzar el masaje cuando Eva se da cuenta que sigue con ropa de calle, así que sale para volver algunos minutos después (tiempo en el que aprovecho de tomarme el resto del té) vestida sólo con unas medias creo que de malla, con ligas y un peto abierto, con nada debajo. Uff, es bien rica Eva. Tiene una cara tierna de niña buena, sus buenas piernas, un trasero firme y unos pechos no muy grandes (aunque para ser naturales, tienen un tamaño bastante bueno) con unos pezones rosaditos. Se disculpa por el retraso y al fin comienza su masaje, el cual es bastante suave. Comenzó desde mis piernas y fue suavemente subiendo hasta mi espalda. Me puso crema en mis manos para poder acariciar mejor sus piernas. Se colocó a la cabecera de la camilla y me "pide ayuda" para aplicar crema en su trasero. Aprovecho de acariciar y agarrar su firme trasero mientras masajea mi espalda. Me invita a darme vuelta y me vuelve a pedir ayuda para masajear sus pechos. Me permite besarlos, con lo que puedo sentir cómo sus pezones se van endureciendo poco a poco, sobresaliendo bellamente sobre sus bellos pechos. Me pide que me acueste, aplica un condón y me hace un rico oral, aunque no duró mucho, ya que luego comenzó a masturbarme manualmente, "pidiéndome" mi leche. Eso me quemó un poco, ya que todavía no había pasado mucho rato y la interacción no había sido mucha (aparte de las caricias que ya mencioné). Se coloca lo suficientemente cerca para permitir que la acaricie (hasta entonces se colocaba justo fuera de mi alcance) mientras me masturbó hasta que terminé. Me limpia y me lleva a la ducha, mientras ella se quedó ordenando. De vuelta pago, nos despedimos (no sin antes inscribirme para el sorteo, a ver si me acompaña la suerte) y de vuelta a la calle.
En resumen, Eva es una mujer muy bella. Es simpática y disfruté la conversación que alcanzamos a tener. Además que es muy bella. Su cara que pasaba de inocente a picarona mientras me masturbaba me encantó. Igual me hubiera gustado un poco más de interacción, una atención más "hot", aunque entiendo que es cosa de estilo. El único punto negativo fue la duración del masaje, el cual fue demasiado corto (tomar en cuenta que salí del centro 50 minutos después de entrar, tiempo en el que pasaron varios minutos esperando que llegara Eva y comenzara el masaje). Hay veces en que un masaje corto se compensa con una atención más "hot", pero este no fue el caso, no sé si es porque así es el estilo de la masajista o simplemente no hubo feeling para eso. En todo caso, no estaba para andar pidiendo atenciones más especiales ya que no andaba con la plata para compensarla. Pero si ese es el estilo de Eva (y no una situación particular), yo creo que su atención podría mejorar mucho si extiende su masaje de unos 10 minutos (que fue como mucho lo que duró) a unos 15 o 17 minutos para el masaje básico. Ojalá lo tomen como consejo y no para mal, ya que a parte de eso, el servicio estuvo bien.
También creo que es bueno destacar la limpieza y la decoración del centro, que lo convierten en un lugar muy agradable. Y por sobre todo destacar la atención en la entrada: que una mujer que ni siquiera es la masajista que te atenderá te reciban bien, con una sonrisa y amablemente, te ofrezcan un té o café y que se preocupen de tu comodidad es algo poco común y en lo que este centro destaca (al menos en las oportunidades en las que he ido). Espero volver pronto, a ver si eso ayuda a aumentar mis probabilidades en el sorteo:P