Centro Masajes : Bliss55
Ubicación : Metro Plaza de Armas
Costo : el publicado
Horario : 12:00 pm
Fono : el publicado
Recepción : Buena, como siempre
Higiene : Impecable, como siempre
Terapeuta o Masajista
Masajista : Albany
Contextura : Alta y delgada. Piernas bien torneadas, trasero firme y redondo, vientre plano, pechos 2.0
Trato : 7.0
Cara : 6.8,
Besos : 5 (muy pocos, pero los que hubieron fueron buenos)
Masaje : 6
Sensitivo : 6.5
Las dos veces anteriores que fui a Bliss fue Albany quien me abrió la puerta y me recibió. Solo con verla esos cortos momentos me dejó mareado, así que ya tenía planificado conocerla cuando volviera a Bliss. Andaba por el centro cuando decido ver si Albany está disponible. A los pocos minutos me responden que sí, así que unos 10 minutos después ya estaba tocando la puerta de Bliss. Me recibe Albany. Tanto esta vez como las anteriores me dio la impresión de que abre la puerta y saluda con una cuota de timidez que contrasta con su provocadora ropa que revela su hermoso cuerpo. Vestía unos pantalones de cuerpo bien ajustados y un peto corto que permitían apreciar la piel morena de esta delgada mujer. Aunque es finita tiene un muy lindo trasero, redondo y firme. Y unos pechos 2.0 que le quedaron tremendos. Burocracia típica: acomodarse, a la ducha y de vuelta a tenderse en la camilla. Albany entra, queda solo en ropa anterior y enciende la calefacción, ya que estaba bastante fresco el ambiente. Comienza su masaje, el cual se nota que lo hace a conciencia, recorriendo todo el cuerpo desde el cuello a las piernas. Mientras tanto comenzamos a hablar y a conocernos. Cualquier timidez que haya sentido antes desapareció por completo: conversamos animadamente de su tiempo en Chile y de nuestro tiempo en los masajes, entre otras cosas. Mientras tanto, mientras se paseaba alrededor de la camilla para masajear distintas partes de su cuerpo, veía esas hermosas caderas y sus redondo trasero ir i venir a la altura de mi cabeza, tentadoramente. Ya que recién nos estábamos conociendo preferí no intentar correr mano, privilegiando la conversación y ver como masajeaba. Finalmente se quita el sostén, revelando finalmente esos maravillosos pechos que solo podía imaginar antes. Mis felicitaciones al doctor que la operó y a su genética de piel, porque tiene unos pechos fantásticos, redonditos y firmes, con unos pezones morenitos que estando duritos son una maravilla. Primero recorrió mi espalda con esos pechos, de arriba a abajo repetidamente, dándome tiempo de acariciar sus pechos, piernas y entrepierna mientras tanto. Me dice que me de vuelta, me enfunda y me comienza a masturbar y hacer un oral para luego subirse desnuda sobre mi para frotar mi miembro contra sus genitales. Mientras tanto, yo iba lentamente acariciando desde sus muslos a su trasero, para luego comenzar a subir a su cintura y a su plano vientre. Parece que iba muy lento, porque tomó mis manos y las llevó a sus pechos, aplicando un poco de presión. Me siento con ella sobre mi y nos besamos un poco, para luego besar sus pechos, saboreando sus pezones duritos. Se baja de la camilla y, sentándome a un lado, comienza a hacerme un buen oral. Ahí puedo apreciar su hermoso cuerpo arrodillado frente a mí, su cinturita estrecha y ese trasero redondito. Su largo pelo negro cayendo sobre su espalda hasta la cintura. Me ofrece terminar en sus pechos, lo que por supuesto acepto. Así que se queda varios minutos intercambiando entre el oral y el manual. Finalmente me quita el condón, continúa con un manual más intenso con mi miembro preso entre sus ricos pechos hasta que me hizo terminar. De ahí se limpió, me ayudó a limpiarme y me preguntó si quería que me masajeara las piernas. Eso me dejó muy gratamente sorprendido. Hace tiempo que no me ofrecían un masaje post sensitivo. Así que me acuesto en la camilla y comienza a masajearme las piernas mientras continuamos conversando. Para terminar masajea mi cuello (dejándome mirar sus pechos balanceándose sobre mí mientras lo hacía). Pero todo llega a su fin, así que me ducho, vuelvo a vestirme y nos despedimos.
En conclusión, muy buena experiencia con Albany. Es una mujer muy hermosa y simpática. Fue un agrado poder conocerla un poco. Se preocupa de hacer un buen masaje y es coqueta y complaciente en el sensitivo. ¿Volvería? Claro que sí.